ESTA NUEVA VERSIÓN DE LA HISTORIA DE HACHIKO VUELVE A LA PANTALLA GRANDE 100 AÑOS DESPUÉS DEL NACIMIENTO DEL CANINO.
De la historia de HACHIKO se conoce desde cuando quién fue su dueño Hidesaburo Ueno, profesor de agronomía en la universidad de Tokio, se lo encontró apenas siendo un cachorro en 1924. Al comienzo no se lo quería quedar, pero con el tiempo se fue encariñando, cambió su opinión y se volvieron inseparables.
El animal acompañaba todas las mañanas al profesor hasta la estación de tren de Shibuya y en las tardes también Hachiko esperaba a su amo en la misma estación. Muchas de las personas que acostumbraban a tener esa misma ruta observaban con simpatía la devoción del perro para con su amo.
Pero el profesor Ueno murió el 21 de Mayo de 1925, a causa de una hemorragia cerebral. Aún así Hachiko, seguía asistiendo a la estación de tren todos los días en búsqueda de su querido amo y se le veía de un lado a otro cómo esperando que en cualquier momento se le pudiera aparecer. Empezó a ser conocido en la estación como “el perro fiel”, los viajeros se encargaron de alimentarlo y cuidarlo.
En homenaje a su perseverancia de seguir esperando a su amo aproximadamente por diez años en la estación de tren, en 1934 se colocó una estatua en su honor, el propio Hachiko estuvo presente en la ceremonia. A este acto asistieron diferentes personalidades de la época, además de Kishi Kazutoshi, autor del libro sobre la historia y un sobrino del profesor Hidesauro Ueno.
Los comerciantes del sector de la estación de tren fueron los grandes beneficiarios de esta historia. Aprovecharon la coincidencia de que para esa época en el zodiaco japonés se celebraba “el año del perro” y comenzaron a comercializar todo tipo de productos alegóricos a Hachiko, desde postales, hasta llaveros, kimonos y libros.
El 8 de marzo de 1935, al año siguiente de su homenaje murió HACHIKO en la misma estación de tren. Su cuerpo fue disecado y lo llevaron en el Museo de Ciencias Naturales de Tokio.
Algunos años después durante la segunda guerra mundial, las autoridades obligaron a que el monumento de Hachiko fuera fundido, el ejército necesitaba el bronce para fabricar armas.
En 1947, una nueva estatua se levantó en la región de Shibuya, que es la que se puede contemplar en la actualidad.
Una historia tan atractiva no podía dejar de llamar la atención a los cineastas. En 1987, la película Hachiko Monogatari, de Seijiro Koyama, alcanzó un gran éxito. Después vendría el remake de Hollywood: Siempre tu lado, Hachiko (2009), donde la acción se traslada a Estados Unidos. Richard Gere interpreta a Parker Wilson, el profesor de música que encuentra a un perro de origen japonés.
Ahora en 2024 nos presentan HACHIKO 2: SIEMPRE A TU LADO. En donde se cambia el panorama para llevarnos a China y, cabe destacar, que no es una secuela. Simplemente, está película será con personajes y locaciones diferentes pero manteniendo el corazón de la historia real. En este caso, Batong será el pequeño cachorro que se ganará (con mucho esfuerzo) el corazón de esta familia, alentado por el profesor que lo encontró a punto de ser atropellado.